Casey Neistat comienza el video bromeando sobre un vlog y luego pasa a hablar sobre la fuerza de voluntad.
Habla de cómo reducir la velocidad de su respiración lo ha ayudado a hacer lo difícil en varias situaciones.
Da un ejemplo de cómo jugar el nuevo juego de Zelda afectó su fuerza de voluntad y le hizo más difícil concentrarse en el trabajo. Para lidiar con esto, comenzó a usar una técnica de respiración que aprendió del libro "El instinto de la fuerza de voluntad", que consistía en inhalar una respiración durante 10 segundos y exhalar durante 10 segundos.
Esta técnica de respiración mejora la variabilidad del ritmo cardíaco, que se refiere a las variaciones en el tiempo entre los latidos del corazón.
Una mayor variabilidad de la frecuencia cardíaca se asocia con una mejor capacidad para ignorar las distracciones, retrasar la gratificación, lidiar con situaciones estresantes y completar tareas difíciles.
La variabilidad de la frecuencia cardíaca es la "reserva" de fuerza de voluntad del cuerpo porque es la mejor medida fisiológica individual de la "respuesta de pausa y planificación", que es lo opuesto a la respuesta de lucha o huida.
La respuesta de pausa y planificación se activa cuando la corteza prefrontal identifica que otra parte del cerebro te está pidiendo que hagas algo que puede beneficiarte ahora pero que no es útil para los objetivos a largo plazo.
Para generar el autocontrol necesario para resistir tales impulsos, se necesita transferir energía del cuerpo al cerebro, y esto se hace regulando el ritmo cardíaco, la presión arterial y la respiración.
El autocontrol es una habilidad que todos deben tener para lograr sus objetivos y vivir una vida saludable.
Es fundamental regular nuestros comportamientos e impulsos, y resistir la tentación cuando sea necesario. Estudios recientes han encontrado que la variabilidad de la frecuencia cardíaca (VFC) es un buen indicador de la fuerza de voluntad, ya que puede predecir quién resistirá los antojos.
Los alcohólicos en recuperación, por ejemplo, cuyo HRV aumenta cuando ven una bebida, tienen más probabilidades de permanecer sobrios, mientras que aquellos cuyo HRV cae tienen más probabilidades de recaer.
Además, la investigación ha demostrado que las personas con mayor autocontrol pueden mantenerse un poco más sobrias con la misma cantidad de alcohol. Por ejemplo, un estudio de la Universidad de Kentucky encontró que los hombres que tenían una clasificación más alta en autocontrol estaban menos borrachos después de beber la misma cantidad de alcohol que los hombres con un autocontrol más bajo.
Hay muchos factores que influyen en nuestra capacidad de autocontrol, como la ansiedad, la ira, la depresión, la falta de sueño, la soledad y la mala calidad del aire, todos ellos asociados a una peor VFC. Por otro lado, el ejercicio regular, una dieta adecuada, la meditación y la respiración controlada pueden mejorar la VFC y aumentar el autocontrol.
La respiración controlada involucra la respuesta de pausa y plan y dirige más energía a la corteza prefrontal, que es responsable del autocontrol. Al hacerlo, podemos mejorar nuestra capacidad para regular nuestros comportamientos e impulsos y resistir la tentación cuando sea necesario. Además, mejorar nuestro comportamiento requiere cambiar nuestra forma de pensar, y esto puede ser difícil cuando nos encontramos en un estado emocional negativo. Por ello, mejorar nuestra fisiología es fundamental para mejorar nuestro comportamiento y conseguir nuestros objetivos.
https://www.youtube.com/watch?v=LOe9GNEDKZ8&t=52s
No hay comentarios:
Publicar un comentario